La tercera etapa fue de tránsito desde Montpellier a Grenoble. Evité parar en Nimes y Valence para llegar con tiempo, buscar hotel y ver la ciudad. Fueron más de 300km en parte por autopista (A7, A49) y otra por carretera (D532 y D1532). Estas carreteras te adelantan lo que posteriormente serán las carreteras de los Alpes, pasando por multitud de pequeños pueblos agrícolas (pasamos de los viñedos de las anteriores etapas al maíz, girasoles, ganado, etc) y rodeados de montañas y bosques. Así se llega a Grenoble, entre gigantes de roca y vegetación.
Lo primero que hice al llegar fue buscar alojamiento. Tuve que preguntar en varios hoteles antes de encontrar uno que tuviera un precio asequible. El hotel Suisse et Bordeaux, muy recomendable tanto por la calidad como el precio. El edificio se asemeja a un antiguo palacio y está situado (place de la Gare) enfrente de la estación de tren, y a 10 minutos andando del centro histórico.

Grenoble es considerada como una ciudad catalizadora de la revolución francesa. Está situada entre tres valles lo que hace que mires donde mires veas montañas, los Alpes. Con gran tradición universitaria (casi 50.000 universitarios) es una de las ciudades más a la vanguardia de Francia. El centro de la ciudad, la Place Notre-Dame, las calles rue des Clercs, Grande Rue, etc están plagados de restaurantes y tiendas sobre todo de ropa y calzado, y también de joyerías. El mercado Ste. Claire es un edificio con cristaleras y una fuente en la entrada principal que es curioso. El Jardín de Ville, tiene un gran parque ideal para relajarse y desconectar, además por una de las entradas hay varios restaurantes con terrazas y protegidas del sol por enormes árboles. No hay que dejar de ver la Place St. André, donde esta la que dicen es la segunda cafetería de Francia, y la Cathédrale Notre-Dame. Hay una pequeña plaza por el centro, ahora no recuerdo el nombre, que servía en su día para los ahorcamientos, ahora tiene las mesas de varios restaurantes cubiertas por un armazón de metal.
Al Fort de la Bastille no tuve tiempo de ir, la mejor forma es cogiendo el teleférico (son 7€) y está abierto hasta las 00:15.
La cena en el Chez Pierre, una pizzería que estaba al lado del hotel. Bien, pasable.

Al día siguiente, la subida a Alpe d’huez (por la D211). Para llegar, saliendo de Grenoble por la avenida Jean Jaurès, solo hay que seguir todo recto por la N85 pasando Le Pont-de-Claix, y salida hacia Briançon/Vizille y luego por la D1091. Si al coger la D1091 camino de Vizille, te desvías a la derecha hacia Laffrey llegarás al Gran lago de Laffrey donde se practican deportes acuáticos como windsurf, vela,etc.
Si antes admiraba a los ciclistas a partir de ahora son como superhéroes, subir esas rampas empinadas y durante semanas en la bicicleta hacen que el ciclista sea una especie supradesarrollada.
La subida en sí, es una sucesión continua de curvas cerradas de 180 grados o más, con una inclinación de más del 10%. Al ser época de verano y vacaciones la carretera estaba llena de ciclistas, hombres, mujeres y niños (si, y como suben algunos) así se entiende la afición que le tienen en Francia al ciclismo. Hay que trazar bien las curvas porque sino…al barranco! Los hay que se lo conocen al dedillo y te pasan que dices, «a donde vas!!!» los grupos de motoristas son muy frecuentes, así que ojo siempre a los retrovisores y a la siguiente curva, a los coches que bajan y a los ciclistas que suben.
La cima es el típico pueblo de ski, con bloques de apartamentos, restaurantes y tiendas. Parece que su principal deporte en esta época de verano es la bici de montaña, claro lógico. Así que se ven continuamente ciclistas con todo tipo de protecciones por las rutas de montaña.
La subida en moto, entre 1,2,3. Tumbando lo necesario pero sin arriesgar, que para eso ya están otros. La bajada usando el freno motor. Ojo a selecciomnar bien los puntos a parar para las fotos, ya que se puede montar un follón, o te puedes ver en un problema para mover la moto. Hay una gran cantidad de Ducatis, cuál será la razón?

El siguiente puerto, Col du Galibier (por la D902). Bajando de Alpe d’huez y siguiendo por la D1091 hacia Briançon de nuevo. La primera parte de la subida parece sencilla, pero el último kilómetro hay que ir muy atento de no salirte de la carretera y acabar despeñado por la ladera. En algunos tramos solo hay una cuerdecilla que limita la carretera y el barranco. Ojo que también hay ganado suelto, a mi me tocó lidiar con unas vacas para que se apartaran del camino, muy amables ellas cruzaron y siguieron su camino. Una vez culminado el puerto, la satisfacción. Allí llegaban ciclistas, motoristas, coches y autocaravanas, de forma que hacerse la foto en los carteles de la cima se convirtió en una odisea.
Siguiendo esta carretera (D1091) están toda una serie de pueblos típicos de los Alpes, Livet, Le Lautaret, La Grave, etc y se atraviesa el parque nacional de Ecrins. En cualquiera de estos pueblos hay actividades de aventura. La actividad principal es el trekking, a la que se unen familias enteras.
Se disfruta conduciendo por esta carretera de continuas curvas y un paisaje inmejorable.
El siguiente destino era Italia. Bajando desde Col du Galibier hacia la parte francesa, y cogiendo a la izquierda. Para llegar al lago Como, se sale de Francia por SS24 dirección Turín. Luego se coge la autopista A32 para Torino, y luego la desviación hacia Milán (por la A4). Hay gran cantidad de peajes pero no es excesivamente caro. El camino es aburrido por la cantidad de km realizados en línea recta, pero es la mejor forma de llegar cuanto antes al destino. Como me faltaban unos 20km. para llegar a la localidad de Como, y sabía que los alojamientos allí serían caros, decidí hacer noche en el camino. Ya que no encontré hostales en la autopista (bueno, me pasé un motel) me salí en el pueblo de Lamazzo. En el hotel Marinoni pasé la noche y que casualidad que el chico de recepción también era motorista (aunque no tiffosi de Rossi). Me estuvo enseñando sus fotos y recomendando carreteras de Italia para ir con la moto (donde no hay policía y el asfalto esta nuevo).
La salida al día siguiente hacia Como, el lago y los puertos suizos … no llegué a la primera…
hola. me ha encantado tu cronica, salimos el proximo dia 4 de agosto hacia los Alpes, con la intencion de hacer gran parte de los puertos que describes. te agradeceria que me orientaras sobre que equipacion llevar. estamos entre chaqueta de verano y llevar los forros y algo de abrigo en la maleta, o la chaqueta de cordura (tambien sin los forros)
muchas gracias
Rafa, muchas gracias por tu comentario! Seguro que el viaje te encantará, ya verás como disfrutas de la moto, paisaje y la aventura motera! 😉
Te escribo al email con el consejo que me solicitas. Un saludo!